Cuando hablamos de las lesiones de tobillo más frecuentes nos estamos refiriendo a la más habitual, que no es otra que el esguince.
En este post vamos a hablar largo y tendido sobre el esguince de tobillo. Contestaremos a cómo se puede prevenir y en caso de sufrirlo, cómo se ha de actuar.
No te preocupes que lo vamos a ver todo en este artículo.
Contenido del artículo
Esguince de tobillo
En Clínica Poyatos sabemos que, quien más o quién menos ha sufrido un esguince, deportistas y no deportistas. Se producen cuando menos te lo esperas.
Antes de adentrarnos en profundidad en el esguince de tobillo vamos a ver cómo está compuesta la articulación.
La forman, el calcáneo, astrágalo tibia y peroné.
Los ligamentos que conectan los huesos entre sí soportan esta articulación y los músculos y los tendones son los que se encargan del movimiento.
Dicho esto, la lesión de ligamentos del tobillo más frecuente es la torcedura. Y la torcedura no es otra cosa que un esguince. El ligamento habitualmente mas afectado es el peroneoastragalino anterior, en la parte externa del tobillo
Grados de un esguince de tobillo
Dependiendo del grado de la lesión, su curación variará entre una semana o hasta varios meses.
Grado I
El más leve. Se caracteriza por un estiramiento o distensión del ligamento, lo que generalmente provoca una ligera inflamación.
Los pacientes experimentan dolor al realizar movimientos y al aplicar presión, pero en la mayoría de los casos, aún pueden caminar.
Grado II
En el caso de un esguince de segundo grado, se produce un desgarro parcial del ligamento.
Esto se acompaña de dolor e inflamación evidente. Se puede formar un hematoma.
Caminar puede ser doloroso en este nivel, aunque generalmente es posible.
Grado III
El más grave.
Se caracteriza por un desgarro total del ligamento, lo que provoca un dolor intenso y una inflamación y hematoma severos.
En algunos casos, puede estar asociado con un desgarro óseo o incluso una fractura, por lo que es crucial realizar pruebas de imagen, como radiografías, para una evaluación precisa.
Cómo tratar el esguince
Lo cierto es que para curar un esguince de tobillo lo más adecuado es que visites a un especialista.
En Clínica Poyatos estaremos encantados de atenderte. Además, puedes seguir los siguientes pasos:
- Reposo. Fundamental. Es necesario que evites cualquier actividad física.
- Hielo. O agua fría durante unos 20 minutos y repetir el proceso cada tres horas.
- Vendas compresivas. Que reducirán la hinchazón. Te tienes que aplicar una venda elástica pero con la precaución de no interrumpir la circulación sanguínea. En este punto hemos de decirte que es mejor que la venda te la coloque un especialista.
- Elevar el pie. Que también contribuye a que la hinchazón vaya desapareciendo.
- Movilización.
El tratamiento adecuado y el seguimiento de estas pautas pueden acelerar la recuperación de un esguince de tobillo y minimizar las posibles complicaciones a largo plazo.
Pero no nos cansaremos de repetir que siempre es aconsejable buscar la orientación de un profesional de la salud para evaluar la gravedad de la lesión y recibir recomendaciones específicas para tu caso.
Ejercicios para después de sufrir un esguince
La rehabilitación después de un esguince a menudo implica ejercicios específicos para fortalecer los músculos y ligamentos. Aquí tienes algunos ejercicios efectivos:
- Movimientos circulares del pie. Gira tu pie en círculos en ambas direcciones para mejorar la movilidad de la articulación.
- Estiramientos de los gemelos. Realiza estiramientos de la pantorrilla para mantener la flexibilidad y reducir la tensión en el tobillo.
- Fortalecimiento de la musculatura del pie y pierna. Este ejercicio fortalece los músculos de la pantorrilla y el tobillo. Ponte de pie y levanta los talones mientras mantienes los dedos en el suelo.
Cómo prevenir los esguinces
La mejor manera de lidiar con un esguince es prevenirlo. Aquí hay algunas medidas que puedes tomar:
- Usa calzado adecuado: Asegúrate de que tus zapatos ofrezcan buen soporte y se ajusten correctamente.
- Realiza ejercicios de fortalecimiento: Incorpora ejercicios de fortalecimiento específicos para los músculos del tobillo en tu rutina de ejercicios.
- Hacer movilidad de tobillo antes de hacer ejercicio: Estirar adecuadamente los músculos del tobillo antes del ejercicio puede ayudar a prevenir lesiones.
- Trabaja la estabilidad de tu cuerpo de diferentes formas con diferentes ejercicios.
Los esguinces son comunes, pero con el cuidado adecuado no tengas ninguna duda de que te vas a recuperar.
Si necesitas algún consejo sobre tu lesión de tobillo, ya sabes dónde nos tienes. Pregúntanos cualquier duda por nuestras vías de contacto.